Amplía tu perspectiva, encuentra tus respuestas.

Quiero confesarte que no soy muy fan de las afirmaciones absolutas ni de las soluciones que parecen ser mágicas. La clave que hoy te comparto es una de las afirmaciones que realmente he entendido, que he vivenciado como cierta  y con la que he sentido vértigo y alivio a partes iguales.

Vértigo porque esta clave significa que las excusas dejan de servirte y que el poner la responsabilidad en el otro y en las circunstancias pierde todo el sentido, pierde fuerza y no es real. El alivio es sentir que nuestra realidad es responsabilidad nuestra, que la vida que quieres es tuya, solo tuya, y que está en tus manos elegir como pensar, como actuar y cuánto de ti quieres poner en un proyecto, en una relación, en lo que tu desees…  

Los años no son buenos ni malos. Los años son como nosotros decidamos que sean en función de la lectura que hagamos de las situaciones que vivimos, sean cuales sean. La clave está dentro de ti. 

Cuando ampliamos nuestra perspectiva, cuando no solo existe lo de fuera sino que lo más importante es lo que vemos dentro de nosotros, el mundo se expande, y las posibilidades aumentan.

Es por eso que apostar por ti, por escucharte, por entenderte, por atenderte, por cuidarte y por encontrar tus propias respuestas es siempre una idea interesante, un propósito acertado que puedes convertir en objetivo.

No te diré que es sencillo, pero sí que merece la pena. Te propongo hacerlo aún con vértigo, con miedo, a pesar de él y con él.

Conectar contigo y con lo que quieres es de valientes, te empodera, te da tierra, te da verdad.

Te escucho, te leo, estoy.